El crecimiento sostenido del sector turístico se ha convertido en uno de los objetivos de cada país. Sin embargo, es fundamental que esta meta esté acompañada de una gestión responsable que evite una gran congestión de visitantes que pueda devenir en espacios públicos sobrecargados y el consecuente daño al medio ambiente.. En otras palabras, una planificación para mitigar y prevenir los efectos del Overtourism.
Para analizar esta situación y proponer medidas específicas, la organización World Travel & Tourism Council (WTTC) ha desarrollado el estudio “Coping with success: Managing overcrowding in tourism destinations”, publicado en diciembre del 2017.
Según esta investigación, son cinco los problemas principales relacionados con el Overtourism:
El impacto a los residentes locales, que se traduce en una mayor contaminación sonora, el aumento del alquiler de las residencias y el desplazamiento de los comerciantes minoristas locales hacia los exteriores de las zonas céntricas.
El deterioro de la experiencia turística debido a las largas colas por la gran cantidad de visitantes.
La excesiva congestión de los espacios públicos como las vías de acceso, los alrededores de los aeropuertos, los centros comerciales, entre otros.
El mayor consumo de los recursos naturales, y la aparición de más residuos contaminantes debido a la gran concurrencia de visitantes.
La amenaza a la que está expuesta la cultura y el patrimonio por el incremento de foráneos.
¿Cómo prevenirlos?
Con la finalidad de prevenir y aliviar la congestión, las autoridades y los empresarios del sector deberán implementar estrategias de gestión a nivel de atractivos turísticos, de ciudades y de países. En ese sentido, la WTTC propone cuatro estrategias generales:
Generar una base de datos: La información recabada por hospedajes, aeropuertos, empresas de transporte y viajeros frecuentes contribuirá a segmentar y conocer a los visitantes, saber en qué momento hay mayor afluencia de visitantes y determinar la temporalidad (baja o alta) del destino. De este modo, se podrá controlar el flujo de turistas y el aforo de un atractivo. Esta información debe actualizarse con regularidad.
Establecer una estrategia de crecimiento sostenible: Las autoridades deben gestionar los atractivos mediante una planificación a largo plazo. Se tendrá que definir la visión, la estrategia de segmentación del público objetivo, la estrategia de producto, la infraestructura y los proveedores, la estrategia de marketing y comunicaciones y la gestión organizacional.
Involucrar a todos los sectores de la sociedad: Ningún resultado sería posible si no existe un compromiso verdadero entre los interesados del sector turístico a nivel comercial, público y social (comunidad, proveedores, autoridades locales, etc.).
Hallar nuevas fuentes de financiamiento: Una vez que los factores mencionados anteriormente se han alineado, las autoridades locales deben buscar el modo de obtener financiamiento para la conservación y mejora de los atractivos. La WTTC recomienda una aplicación sostenible de impuestos que derive estos ingresos al sector turístico y a la comunidad local. Las alianzas público-privadas, e iniciativas como el crowdfunding (financiamiento colectivo a través de Internet) y el mejoramiento de los negocios turísticos, son propuestas innovadoras e ideales para invertir a pequeña escala en infraestructura local.
La gestión completa se debe adaptar a las propias necesidades y requerimientos de cada destino o atractivo. Prevenir el Overtourism y alcanzar el desarrollo turístico sostenido depende de un esfuerzo compartido por los múltiples actores que conforman el sector.
Insumo elaborado por: Nicole Dubois
Fuente: “Coping with success: Managing overcrowding in tourism destinations” World Travel & Tourism Council. Diciembre, 2017
