Nueva Zelanda busca reabrir sus fronteras luego de casi 18 meses de aislamiento inducido por la pandemia, pues plantean que los turistas que visiten Nueva Zelanda no hagan cuarentena, pero solo a aquellos que tengan todas sus vacunas y sean de países de bajo riesgo a partir de principios de 2022.
Los estrictos controles fronterizos y su ventaja geográfica ayudaron a Nueva Zelanda a acabar con el Covid-19 mucho más rápido que casi todos los demás países, pero esto dejó a la nación insular del Pacífico de 5 millones casi completamente aislada del resto del mundo.
La primera ministra, Jacinda Ardern, dijo el jueves que el país aún no está listo para abrirse por completo, pero lo hará en fases a partir de principios del próximo año.
«Simplemente no estamos en condiciones de reabrir por completo todavía», dijo la ministra en un discurso en el que describió los planes para reconectar a Nueva Zelanda con el mundo.
“Cuando nos movamos seremos cuidadosos y deliberados, porque queremos hacerlo con confianza y con la mayor certeza posible”, dijo.
Ardern dijo que el gobierno buscará abrir viajes sin cuarentena a viajeros vacunados de países de bajo riesgo a partir del primer trimestre del próximo año.
Los viajeros que sean de países de riesgo medio realizarán un autoaislamiento o una estadía más corta en un hotel de cuarentena. Pero aquellos que procedan de países de alto riesgo o no estén vacunados deberán pasar 14 días en cuarentena.
Algunos viajeros vacunados podrán participar en un piloto de octubre a diciembre de este año, en el que podrán viajar y aislarse en casa. El país ha registrado solo 2.500 casos y 26 muertes.
Pero existe una escasez tanto para las empresas privadas y el sector público, pues existe una escasez de trabajadores y la reducción de los ingresos.
A pesar de la reapertura gradual, el gobierno mantendrá su estrategia de eliminación contra el Covid-19, con el fin de mantener sus ganancias ganadas con tanto esfuerzo como uno de los pocos países libres de virus, dijo Ardern.
“Eso no quiere decir que la situación que tenemos hoy , se mantendrá para siempre. Nadie quiere eso”, dijo.
Vacunas de velocidad
Ardern dijo que el país acelerará el lanzamiento de la vacunación, y que todas las edades elegibles puedan reservar su vacuna antes del 1 de septiembre. Después de la inoculación existirá un intervalo de seis meses entre dosis para garantizar la efectividad de las vacunas, y que más neozelandeses estén al menos parcialmente vacunados.
El proceso de vacunación de Nueva Zelanda fue lento a comparación de otros países, pues tiene hasta ahora más del 21% de la población completamente vacunada.
Los críticos señalaron que el gobierno tiene que actuar más rápido para proteger a las personas antes de abrir las fronteras.
“Si bien las cifras de vacunación finalmente están aumentando, seguimos siendo los más lentos de la OCDE y el número 120 del mundo”, dijo Judith Collins, líder del opositor Partido Nacional.
«Este no es el ‘frente de la cola’ que nos prometieron y simplemente no es lo suficientemente bueno considerando el mayor riesgo de las nuevas variantes», señaló.
Los brotes provocados por Delta en Australia llevaron a Ardern a suspender el mes pasado la llamada «burbuja de viajes » que permitió viajar sin cuarentena entre los dos países.
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